Luis Miguel reaparece en un comercial y desata el delirio
Toda mi vida fui una ferviente fan independiente de este gran artista sin precedentes, siempre seguí de cerca con mucho cariño, admiración, respeto y emoción, los triunfos en su carrera y los celebré como los míos propios.
- Gracias Luis Miguel por 39 años de entrega - 21 de enero de 2021
- Las anécdotas que demuestran que Luis Miguel es “Un Sol” con sus fans - 19 de enero de 2021
- 5.7 millones de reproducciones en su cumpleaños - 8 de diciembre de 2020
2 de junio de 2020
Comienzo a escribirles esta columna aún con la euforia a flor de piel, esa que se adueñó de mí el pasado miércoles 27 de mayo cuando, a las 7 pm, hora de México, recibí un video que me dejó atónita. Juro que durante los primeros segundos pensé que era una puesta en escena para Tik Tok, la exitosa plataforma para compartir videos cortos que ha causado furor en esta cuarentena, puesto que días atrás había visto a un chavo caracterizando a Luis Miguel en forma magistral. Pero la expresión en mi semblante fue cambiando conforme al avance de la cámara hacia el bendito primer plano, trayecto en el que pasé de una simple actitud curiosa a la euforia en su máxima expresión en cuestión de segundos, 5 para ser más exacta. Si pensábamos que este complicado 2020 no podía sorprendernos más, claramente nos equivocamos porque Luis Miguel nos dejó estupefactos participando de un anuncio para una empresa que brinda servicio de entrega de comida a domicilio. Les juro que mis ojos no podían creer la imagen que les devolvía la pantalla de mi móvil, principalmente porque es una faceta que pocas veces ha explotado, y luego porque reaparecía en el marco de un confinamiento mundial. Confieso que a primera instancia no logré escuchar la frase completa del comercial, me bastó su imagen (galante, seductor e irresistible) y el sonido de su voz, el que podría reconocer entre millones, para abstraerme de lo que me rodeaba e ingresar en otra dimensión. No sé cuantas veces reproduje la publicidad porque quedé encantada, y además necesitaba comprobar que no estaba soñando.
Está de más decir que a pocos minutos del estreno estallaron las redes sociales, y esta publicidad se hizo viral no por el servicio que promociona sino por quien la protagoniza. Una vez más el Hashtag #LuisMiguel fue tendencia mundial en Twitter, y es que este gran artista es sinónimo de éxito y un gran referente, haga lo que haga causará furor en el mundo entero porque sigue tan vigente como ayer.
Personalmente me fascina que se dé la oportunidad de seguir incursionando en este ámbito porque, aunque lo vemos cual Rey ordenando su comida, estas cosas lo hacen sentir más cercano, casi como un simple mortal pidiendo delivery; por supuesto que debemos dejar de lado la extrema elegancia cotidiana que lo caracteriza y lo hace excepcional.
Esta publicidad llegó para brindarnos una bocanada de aire fresco en tiempos tempestuosos, atentando literalmente contra una de nuestras facultades mentales, la imaginación, al invitarnos a fantasear con la posibilidad de llevarle a Luis Miguel su fetuccini con salsa de trufas blancas y queso parmesano, o lo que quiera. Razón por la cual, casi de inmediato, comenzaron a circular los primeros memes como el que aquí les comparto:
Y como no existen límites para fantasear me tomé el atrevimiento de ser más osada, puesto que luego de escuchar los primeros acordes de la música que ameniza este comercial, y ver tanta elegancia, seducción, y encanto concentrados en un solo hombre, no solo me imaginé llevándole su cena sino también quedándome para compartirla. Soñar no cuesta nada, ¡Y qué bien nos hace!
Si tengo la suerte de que algún miembro de la generación post-millennial me esté leyendo, aprovecho la oportunidad para contarle que Luis Miguel ha protagonizado 7 comerciales a lo largo de su vida: Sabritas (Papas fritas), Coca Cola (Bebida gaseosa), Fendi (Perfume), Corona (Cerveza), Ferrero Rocher (Bombones), Promocional para el Gobierno del Estado de Guerrero (Acapulco), y Uber Eats (Envío de comida a domicilio).
Dicen que recordar es volver a vivir, así que los invito a disfrutarlos en un mismo lugar, gracias a la recopilación y edición de una cuentadedicada al apoyo y difusión de su carrera, “Luis Miguel De Luxe”:
Luego de este festín de publicidades con ‘El Sol’, deseo darles a conocer una nueva historia de amor y admiración, la de Susana, una fan de 39 años de Sevilla, España:
Conocí a Luis Miguel en el verano de 1996,cuando yo tenía 15 años, mientras veía en TV el exitoso programa ‘Los 40’. Estaban presentando el nuevo videoclip de la canción “Como es posible que a mi lado”, cuando me quedé prendada de aquel muchacho que cantaba como los dioses, dueño de una mirada seductora y una estampa irresistible. Con la próxima canción que escuché, “Dame”, me volví su fan incondicional, y descubrí al mejor cantante que ha dado el mundo. Desde ese momento empecé a comprar sus discos, a conocer más sobre su vida por medio de notas periodísticas, y a sentir que a través de sus canciones veía reflejadas muchas experiencias y sentimientos vividos. Nadie, que no sea fan, podrá entender la devoción que sentimos por él, solo quienes llevamos años siguiendo su carrera podemos palpitarlo.
Recuerdo el primer concierto al que asistí, en el año 2012, el que fue totalmente sublime y maravilloso. Luis Miguel tiene la magia de hacernos sentir que está cantando solo para uno, y el resto del público desaparece. Pensaran que estoy loca cuando les diga que en ese concierto, al igual que el que viví en 2018, sentí que me miraba, sonreía, y dedicaba cada canción como si fuera la única que estaba cantando, gritando y disfrutando en aquel recinto. Sin dudas esa es la magia de Luis Miguel de la que tanto se habla.
Si pudiera entablar una conversación con él le diría: “Micky, te mereces lo mejor de esta vida porque cuando sales al escenario iluminas el corazón y el alma de cada fan, nos haces inmensamente felices y por un momento olvidamos nuestros problemas. Durante las dos horas de concierto el mundo se detiene para que brille ‘El Sol’, y con sus rayos de luz nos haga sentir radiantes”.
¡Gracias por tanto!
Susana