Luis Miguel regresa para demostrar que es el Único Rey

Euge Cabral
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¿En qué habíamos quedado?, sí, ya lo recuerdo, en que Luis Miguel había hecho temblar las taquillas de los recintos de Argentina, Chile y EEUU, y aún faltaba por vivir las réplicas en los estados de México.

Como había pasado en los países anteriores, Luis Miguel dio la oportunidad de acceder a una preventa exclusiva a los clubes de fans, exactamente un día antes de la venta a un público selecto, titulares de una famosa tarjeta de crédito de alta gama. Como era de esperar, la fila virtual tuvo récord de asistencia, y algunas personas se encontraron con más de 500.000 usuarios en línea antes de su turno.

Foto enviada por una fan

Pero no solo fue tortuosa dicha espera, sino también el alto tráfico de usuarios intentando obtener su pase al paraíso, lo que ocasionó la caída de la página algunas veces. Pero si creen que esto fue estresante, me refiero a la interminable espera, a los 5 minutos que te da el sistema para elegir los tickets y registrar sin error los datos de la tarjeta de crédito mientras no puedes controlar el temblor en tu mano, esperen a leer lo que vivieron algunos fans, cuando vieron esfumarse ante sus ojos la posibilidad de verlo, porque, al momento de pagar, la página les rechazó su tarjeta de crédito sin ningún fundamento.

Cuando se abrió la venta al público en general, en la taquilla y sin ninguna tarjeta de crédito especial, lo que se vivió fue tan asombroso como emocionante. Allí se acercaron miles de personas desesperadas por comprar ese boleto, con el que presenciarán el regreso más esperado, el del mejor artista latino del mundo.

También suponíamos que se iban a agregar más conciertos en Ciudad de México y así fue, se sumaron 3 fechas, y una más para Monterrey. Y ¿Qué creen? se agotaron, como en todos los países, en tan solo un par de horas.

Luis Miguel agotó casi 60 conciertos, en 4 países diferentes, en apenas unos pocos días. ‘El Sol de México’ vuelve a demostrar que es el número uno indiscutido, que la gente lo admira y ama incondicionalmente, y que solo nos basta su voz y su presencia para catapultarnos nuevamente al paraíso. Como leí por ahí, Luis Miguel sigue teniendo el público rendido a sus pies sin la necesidad de anunciar nuevo disco (aún), sin publicidad, sin interactuar en sus redes sociales, sin dar entrevistas, y sin saber prácticamente qué es de su vida.

Quisiera cerrar esta columna, deseando que algún milagro suceda para que, fans de toda la vida que se quedaron sin boleto, puedan reencontrarse con esa voz que nos acaricia y sana el alma.

Mientras tanto, quienes tendremos la bendición de disfrutarlo, nos quedamos tachando los días en el calendario para vivir esa única experiencia a su lado, noches en las que somos felices, saltamos, bailamos, nos emocionamos con él, y compartimos esta pasión con tantos incondicionales.

Euge Cabral

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