Muy a su pesar, Luis Miguel enfrentó una difícil situación

Maria Eugenia Cabral
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Si bien todos pensábamos que esta semana sería la elegida para que ‘El Sol de México’ inaugurara un nuevo año profesional, una vez más y por fuerza mayor se vio obligado a suspender los conciertos que tenía previstos en el Auditorio Nacional. No puedo imaginar lo que estará sintiendo Luis Miguel en estos momentos ya que, conociéndolo, no me cabe la menor duda de que hizo lo humanamente posible por no faltar a la cita, y que hasta el último instante guardó la esperanza de cumplir con sus compromisos. Debe sentirse impotente ante una situación que no puede controlar ni revertir por más que lo desee con todas sus fuerzas. Pero cuando la salud está en juego, por más que se bata a duelo con el médico con tal de obtener el permiso para presentarse en concierto, no hay fundamentos que justifiquen la omisión a las indicaciones del profesional. Un tratamiento debe seguirse al pie de la letra y no puede finalizar de manera anticipada, puesto que depende de la respuesta del paciente, por lo que estarán de acuerdo conmigo en que la salud merece todo nuestro respeto y atención, ya que es lo más sagrado que tenemos en la vida.

Por otra parte, lejos de enojarnos ante este infortunio, los fans de Luis Miguel le demostramos nuestro amor, comprensión, apoyo y deseos de pronta recuperación manifestándonos en las redes sociales. También hemos decidido llevar a cabo la iniciativa de convocarnos este sábado 2 de abril en diferentes partes del mundo (en México será en el mismo Auditorio Nacional a las 7 pm), con el único propósito de hacerle llegar esos bellos sentimientos. Deseamos hacerle saber que estamos dispuestos a esperar el tiempo necesario con tal de verlo recuperado completamente pues, como dije anteriormente, su salud está ante todo y esa es nuestra prioridad hoy en día. 

No voy a negar que hubiéramos deseado verlo y escucharlo porque nos hace mucha falta, si es que tal parece que su voz y su presencia son la fórmula perfecta del elixir que nos embriaga el alma, pero ni en ésta ni en ninguna otra circunstancia podemos permitirnos ser egoístas. Por supuesto que debo asumir que esa virtud no es nada fácil de adquirir cuando Luis Miguel se hace necesitar como nadie, cada vez que su ausencia nos hace experimentar esa sensación de vacío insostenible que nace desde las entrañas. Duele no poder mirarme en sus ojos siempre que lo extraño, y cuando eso pasa me toca luchar con unas ganas incontrolables de echarme a correr hacia algún rincón del mundo, con tal de convertirme en la receptora de su cálida mirada.

A veces me pregunto cómo una persona es capaz de despertar sentimientos tan fuertes e importantes en otra, cómo es que puede movilizarnos tanto, y la verdad nunca encuentro una respuesta lógica. Pero sinceramente no me preocupa resolver esa incógnita, ya que comprendí que la vida se trata de sentir y de dejarse llevar por las emociones. Por eso me permito siempre exteriorizar mis sentimientos hacia Luis Miguel sin importar lo que opinen los demás, amo quererlo y admirarlo sin medida, y no tengo reparos a la hora de gritarlo a los cuatro vientos.

En otro orden de cosas quisiera pedirles encarecidamente a los que se dedican a especular, que se remitan al comunicado de prensa publicado en los sitios oficiales de Luis Miguel y que lo lean atentamente. Allí se informa claramente que Miky necesita más tiempo para lograr exitosamente el tratamiento que le indició su médico, allá por finales del año 2015. Esa es la verdad, no hay nada escrito entrelineas, así que no se empeñen en buscar fantasmas donde no los hay.

Si hay algo que nos caracteriza a sus fans es que tenemos mucho en común, sentimos, pensamos similar, y todos necesitamos retribuirle la felicidad que nos inyecta, con alguna bonita y productiva labor en su homenaje. Hoy tengo el agrado de compartirles un hermoso relato en el que podrán confirmar todo lo que les cuento. Los invito a continuar con la lectura:  

Mi nombre es Andrea Lorena, aunque en esta familia LuisMiguelera me conocen como Andrea Locutora Andy.

Mi admiración por Luis Miguel nació a mis 11 años de edad, allá por el año 1993 cuando el intérprete mexicano lanzó su disco “Aries”.

Comencé a seguir su carrera cuando a mi papá le regalaron el disco “Romances”, con motivo de su cumpleaños número 40. A partir de ahí quedé prendida de su voz y su talento.

El primer concierto al que asistí tuvo lugar en el estadio Vélez Sarsfield, en el año 1994, cuando ‘El Rey’ nos visitó con la gira del disco “Segundo Romance”. Aún siento en el alma no haber podido disfrutar del Tour Aries, el año anterior, pero fue imposible para mí conseguir una entrada, ya que me enteré tarde de la venta y cuando fui todo se había agotado.

Pero no iba a perdérmelo de ninguna manera, así que estuve atenta a la televisación del concierto y le pedí a mi primo que me lo grabara en VHS para rememorarlo cada vez que lo deseara. Recuerdo que ese año asistió a un programa en Canal 13 que era muy exitoso, éste se emitía en las primeras horas de la tarde y se llamaba ‘360, todo para ver’. Uno de los conductores de dicho programa era Alejandro Wiebe (más conocido como Marley), quien con el tiempo se hizo muy amigo de Luis Miguel, por lo que la conversación se tornó muy amena y divertida. Fue muy emocionante ver las instalaciones del canal abarrotadas de fans, puesto que en la puerta y en los alrededores había miles. La producción se encargó de televisar imágenes en vivo desde que ‘El Rey’ hizo su arribo, algo que fue dificultoso por la cantidad de gente agolpada en el ingreso. Se lo vio muy relajado durante la entrevista, y feliz de recibir una montaña de regalos de parte de sus fans.

Al siguiente año y en el mismo canal, nuevamente nos agasajó con una entrevista de la mano de dos grandes periodistas del momento, los que conducían el noticiero más importante.  En esta ocasión la conversación fue mucho más madura, aunque también pudimos observarlo relajado y disfrutando del ida y vuelta de preguntas y respuestas. Es enriquecedor escuchar lo que tiene para decir un hombre tan inteligente como lo es Luis Miguel.

Ese año volví loco a mi papá, puesto que saltaba y gritaba como desquiciada pidiéndole que me comprara las revistas del momento, ya que todas engalanaban su portada con ‘El Sol’.

Luego, con el paso del tiempo, una famosa revista publicó imágenes de su mansión en Beverly Hills, las que de inmediato guardé para enviárselas posteriormente a mi tío que vive en Los Angeles, California. Mi intención era que pudiera averiguar la dirección exacta usando de referencia esas fotos y lo consiguió, así que cuando viajé a Disney, como obsequio al cumplir 15 años, me llevó a conocerla, pero solo fue pasar con el auto sin poder descender.

Como no pude descubrir a Luis Miguel desde sus inicios me faltaban cassettes y CD´s en mi colección, así que puse manos a la obra para completarla y así fue que compré los que estaban en el mercado y los que no, por lo antiguos, los grabé del material de fans.

Luego de verlo por primera vez supe que vendría a mi ciudad, Rosario, y no se imaginan lo que sentí. La alegría y la emoción se apoderaron de mí, como así también la ansiedad, puesto que contaba los días para reencontrarme con él. El 25 de noviembre del año 1994 fui al estadio Rosario Central, al sector campo -en su momento era por orden de llegada y todos de pie-, y vi a Luis Miguel tan cerca como nunca antes lo había hecho, les juro que me costaba creer que era real.

En el año 2010, gracias a que abrí un perfil en la red social Facebook, pude conocer a muchas seguidoras que comparten la misma pasión que yo. Allí conocí a una amiga mexicana que me insistió con la idea de tener un programa de radio ya que tengo la voz y el título de locutora, pero mi respuesta siempre fue la misma, que no podía, porque a pesar de tener los conocimientos para llevar adelante un programa radial no me animaba a enfrentar ese reto. Pero el tiempo pasó y luego de 3 años encontré la manera de hacerlo con mi computadora, instalando los programas correspondientes y desde mi hogar. Este programa, que sale para todo el mundo vía Internet, lo bauticé “Las tardes con Andrea”, ya que no quiero usar el nombre de Luis Miguel sin su autorización. Hace un año que está al aire, cuenta con sus respectivos sitios en las redes sociales, y se transmite dos veces a la semana. Los días martes la dinámica consiste en recorrer una lista de canciones del recuerdo, de cuando Miky era un niño, mientras que los días jueves está predestinado a éxitos más recientes, dentro de los cuales disfrutamos de los villancicos navideños. Pero no sólo su música es la protagonista, sino que tiene espacios de cultura mexicana donde puedo explayarme contando la historia de este país, de sus ciudades importantes, como así de la exquisita gastronomía que los caracteriza. La verdad que hacer este programa es algo que disfruto muchísimo.

Me di también a la tarea de abrir un blog, donde actualizo todas las noticias oficiales que van surgiendo respecto a la carrera de Luis Miguel.

El año 2012 me trajo un regalo muy especial, ya que Luis Miguel llegó con su “The Hits Tour”, y no sólo nuevamente tuve el honor de que visitara mi ciudad, sino que además pude tener fila uno en el Hipódromo Independencia, lugar en el que se presentó.

Siguiendo con mi iniciativa, quiero contarles que en mi programa he tenido el agrado de  entrevistar a Felipe Martínez, uno de los integrantes del  mariachi que acompaña a Luis Miguel, y al maestro Edgar Cortázar, compositor de la canción “Dejá Vù”. También estuvo de invitada Priscila Santa Cruz, la fan que asiste a los conciertos con su velo y ramo de novia”.

También tuve una bonita conversación al aire con una gran amiga del Fan club Oficial ‘Contigo a la distancia’, mi querida Martha Codó, y además conté con la participación de una importante fan, la reconocida periodista Jessica Sáenz, quien supo trabajar en la revista ‘Quién’, de México.

Por supuesto que Euge Cabral fue mi invitada, a quien aprovecho para agradecerle que nos haya contado con lujo de detalles la historia de cómo comenzó a escribir su columna ‘Diario de una fan’. También compartió con la audiencia lo bonito que siente cada vez que tiene la oportunidad de hacerle llegar a Luis Miguel todas sus columnas en formato papel, ya que de esta manera puede conocer, sin filtros, lo que sienten sus fans. Fue justo en ese momento cuando decidí que sería una maravillosa experiencia ser parte de ese espacio, razón por la cual aquí estoy narrándoles mi historia.

Para cerrar quisiera decir que admiro infinitamente a Luis Miguel por su capacidad como cantante, su perseverancia, entrega, profesionalismo y compromiso con el que siempre ha llevado adelante su carrera.

Andy

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